Dejar de hacer papelones. Cumplir con lo que me propongo. No tomarme muy en serio. Y reírme más de mi mísma (cada vez que haga papelones, que seguro van a ser varias). En fin, por muchas más sonrisas, salud!
Todo es muy simple mucho más simple y sin embargo aún así hay momentos en que es demasiado para mí en que no entiendo y no sé si reírme a carcajadas o si llorar de miedo o estarme aquí sin llanto sin risas en silencio asumiendo mi vida mi tránsito mi tiempo.