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Mostrando entradas de febrero, 2008

Los signos del olvido

Levantar el tubo del teléfono para llamar a ese número que antes los dedos marcaban de memoria, casi sin darse cuenta y tener que hacer un esfuerzo mental para recordarlo. Entonces entendés que esa persona que significó tanto en un momento, perdió toda relevancia. Como todo en esta vida, fue bueno mientras duró.

es así y punto.

El jueves tuve la primer clase del taller de escritura con PZK , so me presenté con mi monólogo de jubilada y un paquete de frutigran en la mano. Como llegué antes estuvimos hablando un rato, lo cual fue muy buena onda. Cuando salí de casa estaba nerviosa pero me fue bien o quizás lo imaginaba más severo, el punto es que no me resultó tan terrible. Ahora el problem es que me encuentro en una sequía creativa absoluta, o se me ocurren temas pero no puedo plasmarlos al papel. Por otro lado, el boy ha vuelto pero quema todo eso y bye bye. Igual, el panorama gris de la tarde mejoró después de liberar unas cuantas endorfinas en mi clase de baile. Además, acá todos sabemos que él se lo pierde, ja .

Por el buen camino.

Ahora que decidí que con mi neurosis me alcanza -por no decir me sobra- ya no me alteran los psicópatas que te cagan y después se la dan de víctimas, incluso me causan gracia.

Poemas de un 26 de octubre de 1936.

Hora: 10 de la mañana. Tengo en el alma marcas de fuego Muy lastimado mi corazón Recuerdos tristes, que están latentes Y los despiertan, su evocación. Si esa es la vida, venga la muerte Con sus rigores, será mejor Porque en la tumba ya no se siente Ninguna angustia, ningún dolor. ___ a las 22 horas Luchar, siempre luchar: esta es la vida No te lamentes en tu triste canto Feliz de aquel, que dentro el pecho anida El valor varonil que eleva tanto!! Llegar al fin, con el deber cumplido Tal es el signo que al nacer traemos Alta la frente y jamás vencido Al sepulcro bajar, así debemos. a la vuelta ___ Y cuando llegue fatal la hora aquella Ya en tu sien el laurel de la victoria, Dí: ¡¡Grandeza del dolor mil veces bella!! Por ti sonriendo voy hacia la Gloria Úrsula No conocí a esta señora y tampoco sé cuál es su historia ni la razón de tanto dolor. De ella sólo quedan estos versos y algunos encajes antiguos. Su marido, un tal Jiménez, tuvo un

A:

Es tarde para pedir perdón. Es tarde para arrepentirse. Igual no te importa. Sospecho que ya me olvidaste, siempre pendiente de tu propia felicidad, siempre mejor cuando los demás están mal. Los engañás a todos con tus sonrisas y tu hablar delicado, te creen sincera cuando incluso tus silencios esconden mentiras.

fragmento

Cuando se ve a una mujer caminar por la calle, en Buenos Aires o en París o en cualquier otra parte, no puede saberse cuántas lágrimas se contienen detrás de sus anteojos negros, cuánto ha sufrido ese corazón que se oculta detrás de la piel que se oculta detrás de una blusa de seda, ni qué caminos han recorrido esos zapatos, ni qué cintas de seda aferraron alguna vez sus muñecas en ciertos actos privados en los que el dolor es, de alguna forma, una forma de placer. (alrededor de Lorena)

OUT OF SERVICE.

Después de una semana de llamados para disculparse por su ausencia, hoy cayó, por fin, el plomero. My room está ubicada al lado del lavadero y este Sr. me martilló la cabeza desde las 9 AM, hora en la que llegó hasta hace una hora en la que mis plegarias telepáticas ( que se vaya, que se vaya, que se vaya ) deben haber resultado -porque se fue pero el trabajo está sin terminar. Acto seguido, me levanté y me dirigí zombi a la cocina, despistada como siempre, abrí la canilla para lavar una manzana cuando L.B. me hizo notar que Robert no había finalizado el arreglo. So , mi torpeza me obligó a secar el piso semi-inundado, catástrofe total. Lo peor, es que todavía le quedan como dos días a Mr. Plomero para reparar la tubería .

Simple y Feliz.

¿Viste esos pequeños -casi insignificantes- detalles que llenan tu vida de c o l o r ? Eso me pasa en estos momentos, y sí, puede que sea tonto, pero…¿quién no lo hace? Es inevitable no alegrarte porque hablaron y te sonrió y te dijo que se veían dentro de dos semanas cuando volviera de sus vacaciones. Y no me importa que sea por el hecho de que asisto a sus clases de baile, no; de hecho, me agrada tener un motivo para verlo al menos una vez por semana. No es que me haya olvidado del muchacho que quedó en el Sur, pero comprendan que tiene compromisos porteños previos y debe resolverlos antes de cualquier approach . Mientras deambula el signo de pregunta hasta marzo, yo trato de entretenerme. Claro, girls just wanna have fun . Pasando a otro tema, acabo de llegar del cine, hoy fue el turno de Expiación . Linda película, la historia está muy bien narrada y las interpretaciones también son impecables. Me gustó la fotografía, sobretodo, la escena de los soldados que esperan la retirada en

Encuentro (I)

Volví a encontrarlo muchos años después en un evento que organizaba la empresa en la cual trabajaba. Era un hombre, vestido de traje y corbata. La vida le había deparado un destino muy distinto del que yo hubiese imaginado. Era el vicepresidente de una multinacional muy importante y vivía en un barrio privado. El tiempo nos había cambiado, no lo noté en sus palabras siempre cordiales, sino en su sonrisa. Diez años atrás, hubiésemos escapado apresurados de allí para pasear por las librerías de Av. Corrientes y comer pizza en “Los Inmortales”. Pero ya no, ya no quedaban vestigios del joven desordenado e irresponsable. Podría asegurar que desde que nos despedimos aquella tarde de noviembre en el café La Puerto Rico, él no regresó jamás a robar libros usados ni entró ebrio al cine. Ahora lo llamaban Doctor y conducía un auto último modelo. Me invitó a tomar un café “alguno de estos días” dijo, y me entregó su tarjeta para que lo llamara. Luego sonó su celular y se disculpó por no poder que

Love songs. (o porque todo me recuerda a vos)

Era una miel de otro tiempo, un temblorcito en el cuerpo. Por esos ojos la almendra lamía la tierra, sangraba vergüenza. Él me zumbaba unos versos, revoloteaba en mi cuello. Me secreteaba canciones con fe de Quijote , siempre contra el viento. Reirán todas las moscas del pueblo, de mis labios secos seseando palabras de amor. (medarásmilhijos)

Relato de una tarde de verano.

El abuelo hablaba de su familia, de cómo habían llegado, de su abuela Bahía -me encantó el nombre- que la habían casado cuando tenía apenas 14 años, del Sur, de la 18 de noviembre, de su infancia y yo comenzaba a rodar la película en mi cabeza. Me veía en ese campo de tierras áridas, una vida al mejor estilo La familia Ingalls, monto caballos y socorro a ovejas en pleno parto. Cocino como Francis Mallmann , feliz con mi vida de campo, disfruto de ese mundo sencillo, con sus paisajes simples y solitarios. Fuera de las grandes ciudades y de todo el stress que conllevan. Aunque, claro, es sólo una idea.

sencillo.

Me desperté algo aturdido y de igual manera me dirigí al baño. Afuera, el cielo comenzaba a aclarar. Despacio las sombras de la habitación daban paso a las vetas rojizas del sol que se filtraban por la ventana. La oscuridad se alejaba y el día despertaba al hemisferio dormido. Los minutos transcurrieron calmos mientras la luz se desparramaba por los campos de trigo. Pude escuchar uno o dos camiones que pasaban camino al pueblo. El reloj marcaba las seis y media.

Otoño en Turín.

Yesterday I saw the sun shinin', and the leaves were fallin' down softly My cold hands needed a warm, warm touch, and I was thinkin' about you. Here I am lookin' for signs of leaving You hold my hand, but do you really need me? I guess it's time for me to let you go and I've been thinkin' about you I've been thinkin' about you.