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White nights

Desde la oscuridad de mi cuarto, de polera negra y con mi culotte de leopardo en tonos celestes/violáceos -la única prenda de animal print a la que (ac)cedí-, escucho música de películas norteamericanas independientes, después de ver entera la temporada de Girls en una sola noche, mirar Tiny Furniture dos días después, asustarme de lo mucho que me identifico con el universo retratado por Lena Dunham, salir el sábado a la noche, maquillarme algo borracha pero que así y todo resultara bien, llegar a una fiesta de corte cinematográfico, tener que decirle a mi amigo-anfitrión que ninguno de mis acompañantes quería permanecer ahí, terminar en Acá Bar, y tomar asquerosa cerveza Quilmes Cristal, jugar al Dígalo con lápiz y adivinar la última palabra antes de que nos echaran -literalmente- del lugar: necesidad. Right, seriously, life's so ironic. Si hiciera la lista de mis necesidades creo que sería interminable. O no, en realidad mis necesidades no son tantas, son más bien pocas, una para ser específica: que me quieran, ser querida, o quererme yo. No sé, si lo pienso ahora ese punto se vuelve un poco difuso. Hay algo ahí que no logro ver -no lograr verme bien a mí misma (con todo lo que eso implica). A veces pienso I don't need no boyfriend, we're independent women living on our own, but then...I might well just agree to have sex with you in the bathroom -and that's not a suggestion, it's a requirement. Otra coincidencia cósmica: caminar junto al chico de ojos celestes que me parece lindo desde la primera vez que lo vi seis meses atrás en el cumpleaños de un amigo, parece un poco tímido pero igual hacemos chistes sobre sus alumnos del instituto privado en Recoleta que se asombran cuando él les dice que nunca viajó en avión. La vida es tanto más simple para algunos. Pero no quiero juzgar a nadie, no soy quien para hacerlo tampoco. El asunto es que it's always the same: no love but no games neither -y no hablo de un no love no sex al estilo de la canción de Leticia Brédice en la época que se le dio por la música, no, hablo de las cosas que quedan en el aire, well, all the little promises they don't mean much, pero en el largo plazo te aseguro que sí, que empiezan a pesar las ilusiones en la mochila. Silly girl -when will you learn Dear Josie? Un poco de eso y otro tanto de sentirnos poco valoradas, hablamos de estar cursando una carrera universitaria para barrer y aspirar pisos, calzarse guantes y fregar con el trapo. No, no me molesta ensuciarme, lo que me incomoda es que no reconozcan mi trabajo, que es otra cosa. Otra vez juntos me dijiste con una sonrisa. Sos así, coqueteás con todas un poco. Y está bien, tampoco soy quién para reclamarte nada, para exigirte demandarte nada. Hay que conocer los límites -ajenos y propios. Qué estornudo simpático me dijo Z. y me enseñó a conectar cables. Es dulce, adulto y recientemente soltero. No, no espero nada. No estoy tan loca como para hacerlo. Pero me dio algo de ternura que me dijera eso, alguien que le presta atención a los estornudos. Es raro y es lindo. A veces creo que es eso lo que quiero encontrar (lo que necesito): alguien que se enamore de mis estornudos. Otras veces, ya lo dije, no: soy yo sola en la bañera con el vapor del agua que me rodea y mi vida está completa así, soy yo, soy esto y (no necesito) nada más. Una vez escribí: "de a dos todo es más fácilcomplicado", pero no sé qué pensar ya, quizás sí, o tal vez no, don't know and honestly don't care. Though there are moments when it hurts, loneliness I mean: el sentimiento nos acompaña, even when we sing out loud and dance all night...we all know I'm spinning around in circles and I'm giving it my all but (in the end) I'm not the girl you're taking home. Pero está bien, anyway, no hay mucho que podamos hacer. Así que brindamos por ser jóvenes y estar vivos ponele, y levantamos nuestros vasos de cerveza para mirarnos a los ojos y recién entonces beber. Ja. Esperar una vez más que la fortuna nos alcance, *nos ilumine* o algo así

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