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haber abandonado qué?
haber conseguido qué?
la belleza la costumbre el trapo
yo esperé largo pero no vino
nadie a verme en mi silencio yo esperé pero
no vino nadie a verme en toda muerte
estuve ausente yo o todos los que amé estuvieron ausentes
o estuve ciega yo y no vi nada más que el mendrugo en la mesa el hijo
en la cama, helado, el hombre de mi lado frío, el ladrillo de mi casa
cayéndose, quebrado, el perro que guardé, rabioso
estuve ausente yo o el infierno estuvo
en el ojo que vio caer la tarde, porque el infierno no está
arriba o abajo, sino a nivel de las cosas elementales:
grano negro abierto en la lluvia o sapo, o entero
cadáver desmigajándose por el verano, como una hogaza yéndose
hacia lo invisible
estuve ausente yo o yo me llené de ceguera y no pude
ver cómo de a poquito se fue el padre y los amigos, el verano altísimo
y duro en que perdí todo lo que había para perder y me llené la boca
de esta arena caliente en que hube de construir todo lo ido, lo seco
lo difícil
vine y no estuve, o nadie
estuvo, o desaparecimos de a poco, borrándonos
como se borra el campo en la mansa precipitación
de la noche

Elena Annibali 

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