Ir al contenido principal

CADA CUÁNTO PENSÁS QUE TU VIDA ES UN ERROR

casi nunca es la respuesta que tengo cerca de la lengua

pero estoy tratando de ser honesta con mis sentimientos

así que piensen en un cuenco vacío

imagínense esto un segundo: el cuarto

destripado de mi abuela. su pulso final

que se aparece en las paredes debajo de la venda de la oscuridad.

una temporada de amnesia sin rezos

en el cuenco de las manos. ella seguro sabía que yo

tenía fantasmas en la sangre. debe haber visto todas las noches

en las que quise desaparecer. debe haber visto

que el cuerpo no tiene piedad para el recuerdo

o la herencia. & siempre va a haber soledad

sin importar cuántas veces alguien se cosa

tu nombre a los labios. ¿qué es la esperanza?

tal vez el río, lo que se ahogó, los peces

que se mueven a ciegas con la corriente, o todo eso a la vez.

todo el mundo sueña con romper el cascarón de su propia piel

y ser otra persona. yo me la paso midiendo lo que viene

en función de ese mes en el que la alegría

era la música que mi amante armaba en el silencio de la noche. voy

a dejarme abierta para eso. a lo mejor

la aparición no tiene que ser nada que pueda apropiarse de nosotres.

estoy tratando de decir que los sentimientos son como los ríos: siempre 

se están yendo. quiero decir que todos mis deseos son más valientes que yo.

en algún lugar hay un puente que corona el agua.

andá hasta el final. la música va a llegar hasta vos. 


PRECIOUS ARINZE

Trad. Ezequiel Zaidenwerg

Comentarios

Entradas populares de este blog

Estanque

Cada cosa viva o muerta que el mundo rechaza se reúne: las raíces de los árboles secos que siguen profundamente agarradas a un suelo que ya no las retiene, el moho que al crecer parasita el tallo de la planta joven, el perro moribundo tirado al costado de la ruta, las ramas más jóvenes del ceibo que el temporal derriba, la serpiente de coral emboscada por la fiera, que se repliega sobre sí y permanece quieta como si fuera su propia cáscara vacía en el monte espeso. Para quienes fueron dañados, todo lo que llega después del daño es una gracia. Alguna vez vadearon la vida como si fuera un estanque lleno de alimañas, peligroso en la superficie y en el fondo, hecho para el lucimiento de los intactos y los fuertes. Los que no tienen nada que perder entienden la serenidad con que la materia cesa de resistirse al fin a ser vencida. No hay debilidad ni cobardía en ese dejarse ir que aún en medio del dolor crea puntadas de consuelo: quien fue lastimado una y otra vez sabe

¿Que tiene que tener un poema para que te guste?

Algo del otro que también sea mío. Para mí en el corazón somos todos parecidas/os, y decir en el corazón es como decir en el fondo, pero, en el fondo de la manera de sentir. Suelo decir que el corazón es la cárcel más común y esto significa que no sólo es el encierro sino el espacio compartido con otros. Cuando me encuentro con ese otro que me habla como desde mí, ahí me gusta lo que escribe, porque ahí me emociono. Yo me emociono con algo físico, soy pasional, no puedo emocionarme con una idea poética de una idea poética que sale de otra idea poética. Eso me aburre, es como oír una música obligadamente, no hay disfrute, me quiero ir de ese poema.