Hay días que me subiría al primer avión con destino a cualquier lado menos este. No sé, como un ataque desesperado de cambio, pero claro, después de un rato se me pasa (todo pasa). Igual no venía a hablar de eso, en realidad un poco sí, y este post será una suerte de popurrí (?). Today mi tía viajaba a Bariloche por trabajo y te juro, qué ganas de irme con ella. Ay, qué lindo es viajar (hice referencia a este asunto varias veces ya). Subirte al micro y puf! todos tus problemas se quedaron atrás, nada de pensar en sociología o economía, o el nuevo idiota que se te plantó en la cabeza, nada de eso, sólo ver el paisaje por la ventanilla escuchar música rutera para la ocasión y disfrutar. Mirá, ya te dieron ganas a vos también, ja. Y eso, últimamente pienso mucho en viajar, en lo que quiero hacer de mi vida, de dónde vengo y hacia dónde voy, y todas estas idioteces que uno piensa cuando es joven y es idealista y después te convertís en un adulto idiota y te das cuenta de que no lograste nada de todo eso, pero mejor no, mantengamos la ilusión un rato más y digamos que nosotros no, nosotros vamos a cumplir nuestros sueños, yeah. Tema aparte, alguno vio la entrada de casamiento super divertida que todo el mundo está comentando?? Me pareció muy genial, qué ganas de hacer lo mismo eventually. Bueno y después, entre las otras cosas-no-relevantes por comentar del día de hoy, esta es la peor, y es que he notado que los bloggers hombres dejan su mail o contacto y las mujeres no (o al menos la gran mayoría, claro). Vieron? Como diría Lola, esconde más de lo que aparenta. Ah, y por último, que a pesar de mis esperanzas, el reiki, y la vitamina C, el típico resfrío del Invierno logró captarme y ahora tengo toda la nariz roja y me arde.
Cada cosa viva o muerta que el mundo rechaza se reúne: las raíces de los árboles secos que siguen profundamente agarradas a un suelo que ya no las retiene, el moho que al crecer parasita el tallo de la planta joven, el perro moribundo tirado al costado de la ruta, las ramas más jóvenes del ceibo que el temporal derriba, la serpiente de coral emboscada por la fiera, que se repliega sobre sí y permanece quieta como si fuera su propia cáscara vacía en el monte espeso. Para quienes fueron dañados, todo lo que llega después del daño es una gracia. Alguna vez vadearon la vida como si fuera un estanque lleno de alimañas, peligroso en la superficie y en el fondo, hecho para el lucimiento de los intactos y los fuertes. Los que no tienen nada que perder entienden la serenidad con que la materia cesa de resistirse al fin a ser vencida. No hay debilidad ni cobardía en ese dejarse ir que aún en medio del dolor crea puntadas de consuelo: quien fue lastimado una y otra vez sabe
Comentarios
Viajar. Me encanta viajar. No sé si habrá alguien que elija quedarse cuando puede irse. Debemos ser nómades por naturaleza, cambiantes. Me gusta esa idea.
Otra idea que me gusta es la del idealismo adolescente. Soy ingenua y pienso que mis ideas me van a acompañar siempre. Prefiero no pensar que es la edad, sino que son mis convicciones, mi forma de ver el mundo, de sentir. No sé, a lo mejor en unos años pienso que fui una ciega, pero quiero pensar que algo se puede cambiar todavía.
Un beso!
Mañana capitulazo de 'Tratame...', a ver cómo se resuelve el bardo familiar, jaja.